Hasta que finalmente fuimos con Andy, Gabo Sol y Ofelia a Wángfǔjǐng (王府井). Que es eso? Es una calle muy pituca muy cerca de Tian’anmen (o 天安门). Una especie de calle Florida, pero con locales del nivel de Cartier; Mont Blanc; etc. Y, en una de las las callecitas que la cruzan hay una seria de puestitos callejeros que venden comida. Ahí hay de todo, desde brochettes de frutas solas o acarameladas, boazi, jiaozi y cangrejos….hasta gusanos de seda, ciempiés, carne de avestruz, serpiente marina, escorpiones, caballitos de mar, etc. Todo esta en forma de brochette, y se fríe en el momento. Bien fresquito.
Al mejor estilo Marley, me compre una coquita de 600 para darme valor y empecé con los gusanos de seda, crocantes por fuera y como con paté por dentro…muy similar a los chinchulines. Lo convencí a Andy de probarlo, aunque no se mostró muy conforme con el gusto
Sol, por su parte opto por la dieta Light, banana frita con azúcar, aunque mucho gusto aunque mucho gusto a banana no tenia eso.
Luego, y para comer algo ‘normal’ compramos con Andrés unas ostras, les ponían verduritas y algo picante y las estaban asando. Nada del otro mundo.
Seguí con los caballitos de mar, la verdad es que para lo que salieron y para estar en peligro de extinción, no son tan ricos. Sabor a pescado muy intenso, algo gomosos.
Luego de unos metros de ver siempre lo mismo, nos topamos con el local de los escorpiones, había de diversos tamaños, precios y colores. Optamos por una brochette que traía 3 chiquitos…..la verdad es que estaban buenísimos. Crocantes y con un gustito muy interesante. Tal es así que repetimos el plato.
Por último, y gracias a la generosidad de la Srita. Corvalán, probé ciempiés. Esto si era feito, sabía a remedio amargo…..
Ahora queda volver, quiero probar la carne de avestruz, los capullos de abeja y la serpiente de mar. El pene/testículo de cordero no creo que lo pruebe, tengo amigos que morirían por comerlos, pero allá ellos.
Saludos,
Leo
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